Viajar no solo te abre el alma y el espíritu, nos da la oportunidad de conocer otras gentes, otras culturas, andar y patear tanto las ciudades nos provoca un hambre tremendo, así que ese es otro de los atractivos de viajar, el conocer y probar nuevos platos y sabores, eso es lo que vamos a hacer por nuestra ruta por la idílica Costa Brava y Gerona en concreto, puede ser el fin de semana perfecto. La oferta gastronómica en la Costa Brava es impresionante y de una calidad indiscutible. Vamos a hablaros un poco de sus secretos.
Vamos a empezar por Gerona y pararemos a comer en Le Bistrot donde destaca su poderoso menú del día, en una conocida encuesta de Correos se encuentra en el lugar mas idílico y romántico de toda España y eso es mucho decir, su mousse de chocolate hay que probarla si o si. Otra parada obligada es la heladería Rocambolesc de los hermanos Roca que como sabéis tienen el restaurante numero uno del mundo y como nos será imposible coger una mesa para comer en el Celler de Can Roca al menos sí podemos probar uno de sus ya famosos helados, buen plan, verdad?. Para rematar el día iremos a cenar a Sant Martí d’Empúries, antes nos podemos dar un baño en la playa y una vez en el restaurante las alcachofas rebozadas son una excelente elección.
No podemos dejar de visitar Pals que es de esos pueblos medievales y como suele ser habitual su casco histórico tiene un encanto increíble y por allí nos acercaremos a comer a El Pedró de Pals que después de 40 años a sus espaldas siguen dando de comer de una manera excelente, y que se puede comer? recomendamos sus arroces como por ejemplo el especial de la casa, el arroz Pals, después de comer podremos recorrer el pueblo para bajar la comida y dejarnos envolver por su magia medieval.
Ningún viaje por Gerona y por la Costa Brava puede ser completo si no nos acercamos a Cadaqués y hacerlo fuera de temporada es un lujo solo al alcance de los que lo conocen, alojarse no es ni fácil ni barato por sus pocas plaza hoteleras pero los apartamentos pueden ser una excelente opción, además, sus terrazas con vistas es el marco incomparable para la cena y para el desayuno del día siguiente .., que rápido pasa el fin de semana, verdad? yo ya estoy deseando volver y probar el resto de platos que en un fin de semana solo no se pueden degustar.